Tesis: Autodescripción de género y violencia de pareja

En febrero de 2019, Jorge Ricardo Hidalgo Chagoya se recibió de la Licenciatura en Psicología en Centro Eleia con la tesis Asociación entre autodescripción de género y violencia de pareja. Un estudio con mujeres universitarias. Aquí presentamos algunas ideas centrales de su investigación.

Asociación entre autodescripción de género y violencia de pareja

Por Jorge Ricardo Hidalgo Chagoya

 

La violencia de pareja se define como el ejercicio de poder a través de acciones u omisiones con el objetivo de controlar y dañar a la persona con la cual se tiene un vínculo íntimo. Es un grave problema de salud desatendido por el Estado mexicano, cuyos efectos negativos en el bienestar y la calidad de vida de las mujeres es determinante. Entre los problemas desencadenados se resaltan desórdenes de ansiedad (principalmente el trastorno por estrés postraumático), desórdenes alimenticios, trastornos afectivos y, como última consecuencia, la muerte por suicidio o feminicidio.

En la investigación cuantitativa realizada para el trabajo de grado, se observó el fenómeno para relacionarlo con los roles de género, variable de naturaleza socio-ideológica estudiada como componente formativo de la identidad individual. El género se resume como la forma en que el ser humano aprende a ser “buen hombre” o “buena mujer”, abarcando una serie de normas, funciones y prohibiciones distribuidas en la tradicional dicotomía entre feminidad y masculinidad.

La población universitaria suele ser un nicho en el que se subestima la violencia de pareja, sin embargo, los jóvenes suelen ser vulnerables debido a que el noviazgo representa la función crucial de generar relaciones interpersonales fuera de la familia nuclear, apuntalando a una autonomía adulta. Por esta razón se decidió llevar a cabo la investigación en el ámbito universitario; la muestra está integrada por 140 mujeres universitarias de la Universidad Nacional Autónoma de México, a quienes se les aplicaron, en forma individual y grupal, dos inventarios para medir autodescripción de género (Inventario de Masculinidad y Feminidad, que utiliza las categorías tradicionalistas de masculinidad, machismo, feminidad y sumisión) y antecedentes en violencia de pareja (Cuestionario de Violencia Ejercida y Sufrida de Pareja, que toma en cuenta modalidades de frecuencia y tipos de daño), previo consentimiento informado.

Al término de la investigación se les proporcionaron dos folletos con información sobre instituciones en las que podrían obtener ayuda en caso de padecer violencia. Después de poner en juego criterios de exclusión, se llevó a cabo la captura en la plataforma Statistical Package for the Social Sciences (SPSS, versión 21). Los datos del estudio fueron analizados por medio de análisis de frecuencias, correlación de Pearson, y regresiones lineales múltiples.

Como resultados se observaron asociaciones estadísticamente significativas entre los índices de sumisión y violencia sufrida en frecuencia y daño (una alta identificación con un rol sumiso se asocia con una tendencia de padecer violencia de pareja), así como entre machismo con violencia ejercida en frecuencia. Asimismo, se encontró asociación entre machismo y violencia ejercida en daño (una identificación fuerte con un rol machista se relacionaría con ejercer violencia de pareja).

Se encontró también una relación entre violencia ejercida y sufrida (mujeres que ejercen más violencia también sufren más violencia), aunque habría que reconocer que la violencia de pareja ejercida por mujeres es distinta a la ejercida por hombres, en cuanto esta última está inserta en un contexto patriarcal que posibilita su existencia y escalamiento, donde a su vez proliferan la violencia simbólica y estructural en contra de la mujer, arraigadas en una cultura que facilita la impunidad, invisibilización y minimización.

Dentro de las identificaciones de género, la muestra revela una tendencia andrógina (con puntuaciones altas tanto en feminidad como masculinidad), seguido por propensión al machismo y, finalmente, a la sumisión; también se verifica que el tipo de violencia más frecuente es la psicosocial, siendo la menos común la física.

Se concluye que la violencia de pareja aún es un problema entre universitarias, y que parte del fenómeno complejo se explica a través de la identificación con ciertos ideales en roles de género. Con base en estos resultados, se podrían idear intervenciones de prevención primaria de violencia de pareja dirigidas a mujeres, encaminadas a modificar ideas generizadas de sí mismas como sumisas y dóciles; sin embargo, es también necesaria la intervención dirigida a varones, con el fin de desmontar los cimientos violentos en los que la masculinidad se asienta, especialmente en Latinoamérica. Esto último no sólo con el fin de responsabilizar al hombre por sus agresiones, sino porque se ha constatado que, aun después de que la mujer ha logrado establecer un límite e inicia la ruptura del vínculo, la violencia incrementa y los gestos vengativos masculinos pueden aplazarse hasta después de años.

Referencias

Hidalgo Chagoya, J. R. (2019). Asociación entre autodescripción de género y violencia de pareja. Un estudio con mujeres universitarias. México: Centro Eleia. Tesis de Licenciatura en Psicología.

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