Por Esperanza Ávalos, Mariana Castillo y Francisco Javier Hernández

El psicoanálisis es materia viva. Su vitalidad se nutre de la teoría y de la clínica como consecuencia directa de las aplicaciones terapéuticas del método. André Green, con su particular mirada, siempre transmitió su preocupación por retomar una lectura cuidadosa de las semillas sembradas por Sigmund Freud, con el fin de desarrollar una teoría y práctica psicoanalítica apegada a sus ejes. En este apartado se abordará “el objeto” como uno de los ejes fundamentales que, a lo largo de la historia del psicoanálisis, ha adquirido importancia como un elemento fundamental de la vida psíquica. No obstante, bajo la mirada de Green, ha de considerarse de manera cuidadosa para que quede unido a la pulsión en un par indisoluble. Como es sabido, Green deja clara la intención de sus escritos desde sus títulos. El que nos ocupa en estas líneas, “Apertura para una renovación de la teoría. Linaje subjetal, linaje objetal”, anuncia una propuesta novedosa, pues entrelaza al sujeto y al objeto, dos conceptos teóricos fundamentales que han seguido un camino de desarrollo dispar, ya que en algunas teorías se exalta al sujeto, dejando de lado al objeto, o viceversa.

En la propuesta de ampliación teórica, Green concibe un objeto que se descompone en partes, lo que implica una complejidad en la que éste no sólo cumple diversas funciones, sino que se compone de elementos entretejidos. Vale la pena detenernos en los elementos que, para Green, componen al objeto, ya que en cada uno se observa una profundidad teórica que condensa mucho del pensamiento del autor, siempre teniendo en mente la relación que el objeto guarda con el sujeto de la vida pulsional. Green da cuenta de la constitución del objeto; éste es un punto nodal de su propuesta teórica:

En primer lugar, el objeto posee una parte incorporada por el yo y se revela en las identificaciones, es decir, el objeto pasa por un proceso de construcción y de modelaje que toma prestados elementos de otros objetos. Además, los objetos son fundamentales para el desarrollo del yo, que se construye en parte por las identificaciones. Esta cualidad del objeto da cuenta de lo parecido, lo similar.  En segundo lugar, el objeto posee una parte que se define como propiedad del yo, pero diferente de éste. Su meta primordial es que el objeto pueda diferenciarse del yo, lo que da cuenta de lo diferente y lo único. Esta es una cualidad fundamental y de especial relevancia en la mirada de Green, ya que en ella se plasma su postura ante el inicio del desarrollo psíquico, en el que deben suceder muchas cosas para que el yo pueda concebir la diferencia con el objeto. El odio surge como una respuesta ante la diferencia y la independencia, el destino del yo y del objeto es que este pueda ser cargado de odio y al mismo tiempo, la diferencia permite la movilización pulsional en busca del objeto amado y odiado; esa es la lógica del deseo. Sólo si el objeto es diferente, si posee algo de lo que el yo carece, éste podrá iniciar el camino de la búsqueda de satisfacción. Este objeto se coloca como lo imposible y lo prohibido, con todas sus consecuencias.  

Siempre existe una parte irreductible a toda apropiación por parte del yo, que exige diferencia y alteridad, lo que trae como consecuencia que el objeto pueda perderse y, por ello, también pueda ser odiado. Una parte del objeto se modifica, cuando aparecen nuevas formas de satisfacción o para calmar deseos que han sustituido aquellos que no se han podido realizar, es decir, para prevenir las vicisitudes de la no realización. En este sentido, el objeto obedece la lógica de la representación; no es el objeto primario, pero se modifica para poder ofrecer satisfacciones sustitutivas del deseo. El sujeto puede iniciar la búsqueda de objetos que guardan parecido con el objeto original, en los cuales pueda satisfacer las pulsiones de manera limitada. Por ejemplo, en la vida adolescente es común enamorarse de figuras de autoridad, porque representan un libreto edípico: un maestro representa al padre, pero no es el padre. Después, esa elección puede desplazarse a otro objeto que, en las representaciones, quede ligado al original; se puede tomar como pareja a un joven que lleva el mismo nombre o el mismo perfume que el padre. 

El objeto también posee una parte que sirve para la creación de nuevos objetos y nuevas funciones que más tarde puedan recibir estatus de objeto. Esta es quizá una de las cualidades del objeto en la que Green se inspira para construir y describir la función de objetalización, en la que se ahondará más adelante.  En consecuencia, sabemos que el objeto se caracteriza por su multiplicidad y heterogeneidad. Por lo tanto, no existe la posibilidad de llegar a un concepto unificado. Por ello, Green piensa que debemos renunciar a la unidad homogenizante del concepto de objeto. 

En la película La Favorita (Lanthimos, 2018), la reina Anne tiene 17 conejos en jaulas dentro de sus aposentos. En un diálogo con la dama de compañía, la reina pide que salude a sus “bebés”; la criada lo hace con gusto y muestra interés. La reina habla de sus 17 bebés perdidos y describe las características de algunos de sus conejos. En el ejemplo, la relación que la reina establece con sus bebés perdidos, suplantados por los conejos (que representan a los bebés, pero no son bebés), le otorga una característica identitaria de pérdida: madre, no madre. En este mismo ejemplo, el objeto también es diferente: un bebé es la causa del deseo de la reina, quien entrega su vida psíquica a encontrar esa relación entre una madre y un bebé. Por momentos, ella es la madre, pero en otros ocupa el lugar de una adolorida bebé que tiene que ser cuidada con empeño y maltrato. Así, establece una relación con tintes masoquistas con su consejera, por la que se deja dominar en nombre del amor y de la sumisión.

En el diplomado “¿En qué se distingue la obra de André Green y qué aporta al psicoanálisis actual?”, exploraremos las aportaciones de estas ideas al psicoanálisis y a la clínica contemporánea.

Referencias:

Green, A. (2011). Apertura para una renovación de la teoría: linaje subjetal y linaje objetal. Ideas directrices para un psicoanálisis contemporáneo: desconocimiento y reconocimiento del inconsciente (pp. 159-174). Amorrortu Editores.

——-. (1995). La pulsión y el objeto. La metapsicología ampliada (pp. 21-44). Amorrortu Editores.

Lanthimos, Y. (Director). (2018). La favorita [Película]. Fox Searchlight Pictures.