Femenino y masculino: actualizaciones psicoanalíticas, género, familia y trabajo

Por Muriel Wolowelski

Del otro lado del teléfono una voz masculina pregunta por mí, se trata de Michelle, quien solicita una cita recomendado por un conocido. La impresión que sobreviene en el primer encuentro es de cierto desconcierto porque es una mujer.

Esta anécdota que inaugura el tratamiento de un paciente es significativa. Ella es ahora una mujer de 40 años que consulta angustiada por la pérdida de su madre. En el transcurso de las entrevistas, relata historias de su niñez, el vínculo cercano y al tiempo tiránico con su madre, la ausencia de su padre y otras dificultades en su vida de pareja, laboral e interpersonal; sin embargo, su sexualidad no es motivo de consulta. Hoy en día encontramos con mayor frecuencia casos similares al de Michelle.

La sexualidad se integra en este proceso de transformación social manifiesto, por ejemplo, en las parejas homosexuales, el travestismo, el transexualismo y las presentaciones queer que cuestionan el concepto de diferencia sexual. Es común encontrar que los pacientes con diversidades sexuales acudan a las consultas por problemas de pareja, pérdidas como la de un ser querido, el trabajo, una posición social, pero no es frecuente que el motivo de consulta sea un conflicto con su propia sexualidad.

Estos son algunos de los temas de interés que abordan las investigaciones sobre psicoanálisis y género. Las preguntas que surgen son infinitas y el tema a investigar es sumamente interesante. ¿Cuál es la relación entre psicoanálisis y género? ¿Cómo se establecen las relaciones entre género, identidad sexual y psicoanálisis? ¿Cómo aborda el psicoanálisis las nuevas parentalidades, la gestación por vientres subrogados, las nuevas estructuras de familia? ¿Es el terreno psicoanalítico el idóneo para pensar sobre los roles que desempeñan los hombres y las mujeres en estas nuevas construcciones sociales y laborales?

La reflexión profunda de todos estos interrogantes es indispensable en la vida social y para los profesionales de la salud, especialmente dentro de la labor del psicoanalista actual en su actividad clínica, dado que los pacientes presentan problemáticas nunca antes vistas.

Nuestro siglo atestigua los cambios producidos en las concepciones referidas a lo masculino y femenino provenientes de la sociedad patriarcal. Los alcances médicos y tecnológicos, los fenómenos de globalización, las diversidades sexuales, los modelos de familia y las identidades cambiantes conforman un nuevo escenario para los diferentes campos en los que se desenvuelve el ser humano.

Los roles de la sexualidad humana quedan ampliamente cuestionados desde diversos ámbitos; las artes con sus manifestaciones contemporáneas, los estudios sociales con las apariciones de diversos ordenamientos y agrupaciones, las expresiones de la cultura, los modelos de parentalidad. Todos estos cambios conducen a una ampliación permanente y constante del individuo en la sociedad y las problemáticas que afronta.

El psicoanálisis contemporáneo enfrenta el desafío de investigar el desarrollo de las diferencias sexuales en un contexto radicalmente distinto al que se presentaba en el siglo en que Freud proponía sus primeras teorías sobre inconsciente y sexualidad. La sociedad tradicional en la que el hombre fungía como padre de familia, esposo y proveedor, donde ejercía su ley dominante mientras la mujer se ocupaba de llevar a cabo los roles de esposa y madre, se ha transformado. La mujer se ha ubicado en un lugar productivo, sale de la casa a realizar labores profesionales, la crianza de los hijos se comparte con los padres, quienes a su vez se involucran más en las actividades cotidianas de la familia.

Los vientos soplaron y el arquetipo nuclear de familia se fue transformando, no solamente porque los modelos económicos y políticos condujeron a las familias a extenderse incluyendo a los abuelos y tíos, sino porque se desarrollaron modelos diferentes en los que caben las mono y homoparentalidades. De esta modificación en las concepciones del hombre y la mujer también deriva una alteración en el deseo de hijos que se posterga o se declina definitivamente.

Todas estas nuevas presentaciones forman parte de las sociedades contemporáneas y abren infinidad de interrogantes y nuevas problemáticas derivadas que competen a una gran variedad de ámbitos profesionales. El análisis de estas diferencias sexuales y sus derivaciones tiene fuertes implicaciones en la práctica psicoanalítica y constituye un desafío para la labor clínica que supone hacer una revisión exhaustiva de los procesos en los que las personas desarrollan su identidad, el lugar que ocupan en la familia y en el trabajo. De este modo cobra gran relevancia la posición del analista junto con la responsabilidad de ampliar el campo de disposición emocional para la atención eficaz y oportuna.

El diplomado Femenino y masculino: actualizaciones psicoanalíticas, género, familia y trabajo se propone recorrer el territorio de las concepciones sobre lo masculino y lo femenino con una mirada psicoanalítica inclusiva que integra las perspectivas de género actuales. La propuesta incluye además una forma creativa de reflexionar sobre esta materia desde la cultura, el arte, la literatura, así como el uso de plataformas virtuales para la expresión de estas manifestaciones.

Presentamos un diplomado que sin duda ofrece una excelente oportunidad de actualización sobre temas que ocupan a un amplio sector social, así como a los interesados en desarrollar sus habilidades en el desempeño terapéutico y clínico.

Inicio: jueves 17 de octubre, 2019

Horario: 18:00 a 21:00 h

Sede: Plantel Sur

Duración: 9 meses

Coordinadores: Carmen Islas y Muriel Wolowelski

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